El impacto de la DANA en los campos de arroz a finales de octubre de 2024 ha supuesto un duro golpe para la Albufera y los arrozales valencianos.

La Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) que azotó la Comunidad Valenciana en octubre de 2024 ha dejado una huella de alto impacto ecológico, medioambiental y agrario en el Parque Natural de la Albufera y sus alrededores, además de los extensos campos dedicados al cultivo del arroz.

Las intensas lluvias torrenciales provocaron una crecida sin precedentes en el lago, arrastrando consigo una gran cantidad de residuos y sedimentos que han alterado gravemente el ecosistema.

Según las fuentes consultadas, la Albufera recibió un volumen de agua equivalente a un año y medio de aportaciones normales en pocas horas. Esto provocó una inundación de magnitud excepcional, anegando zonas que raramente se ven afectadas.

También, la riada arrastró todo tipo de desechos al lago, incluyendo cañas, plásticos, aceites, combustible y demás residuos químicos, electrodomésticos e incluso vehículos. Esta contaminación supone una grave amenaza para la fauna y flora del parque, alterando las cadenas tróficas y contaminando el agua y los sedimentos.

Daños de la DANA en los campos de arroz de Valencia.

Pero en el ámbito del cultivo de arroz de Valencia, estrechamente ligada a este Parque Natural, también ha supuesto un fuerte impacto en los campos de arroz. Por suerte, los daños no han sido a nivel global, dadas las dimensiones de la Albufera y su punto concreto de impacto en ella. Recordemos que su cultivo, goza de la Denominación de Origen Protegida (D.O.P) Arroz de Valencia / Arròs de València.

Por una parte, las inundaciones han afectado gravemente a almacenes, silos y otras instalaciones donde se guardaba el arroz ya cosechado. Esto ha provocado la pérdida de importantes cantidades de grano, además de daños en la maquinaria y las propias infraestructuras.

Por otra, el agua de la inundación, cargada de sedimentos, residuos y contaminantes, ha entrado en contacto con algunas de las reservas de arroz almacenado, lo que supone un grave riesgo de contaminación que podría afectar a la calidad y la seguridad alimentaria del producto.

Y están los daños en infraestructuras de riego y drenaje. Aunque la cosecha ya se había realizado, las inundaciones han dañado gravemente las infraestructuras de riego y drenaje que son esenciales para la preparación de los campos para la próxima campaña. Esto podría retrasar la siembra y afectar a la producción del año siguiente.

Sin olvidar, que la pérdida de parte de las reservas de arroz almacenado y los daños en las infraestructuras tendrán un importante impacto económico en el sector arrocero de la zona, afectando a agricultores, cooperativas y empresas relacionadas.

Superficie en hectáreas afectadas por la DANA en los cultivos de la Comunidad Valenciana.

Si bien, los datos sobre la superficie en hectáreas afectadas por la DANA en los cultivos de la Comunidad Valenciana varían notablemente, podemos aportar algunos las fuentes.

Según la organización agraria AVA-Asaja, eleva las pérdidas en la agricultura de la Comunidad Valenciana a 1.379 millones de euros, con un total de 50.184 hectáreas agropecuarias afectadas en doce comarcas de Valencia y tres de Castellón.

De estas, 40.223 hectáreas corresponden a la provincia de Valencia. Destacan los cítricos como el cultivo más perjudicado, con 21.993 hectáreas afectadas en la provincia de Valencia. Esta fuente se centra en el impacto económico y las pérdidas en la agricultura en general, no específicamente en el arrozal.

Según la agencia de noticias EFE, señala que 54.312 hectáreas de cultivo y 50.000 parcelas resultaron destruidas en la provincia de Valencia. Al igual que la anterior, no especifica si se refiere exclusivamente a la Albufera o a toda la provincia.

En cambio, el medio El Tiempo, sí se centra en el impacto ambiental en la Albufera y las playas, estimando que hay más de 155.000 metros cuadrados dañados por restos vegetales y residuos arrastrados por la DANA. Esta cifra se refiere a la superficie afectada por acumulación de residuos dentro del parque natural, no a la superficie inundada de arrozales.

Según observamos, y centrándonos en las hectáreas de cultivo afectadas en la provincia de Valencia, las cifras se sitúan entre 40.223 hectáreas y 54.312 hectáreas. Es importante destacar que estas cifras incluyen todo tipo de cultivos, no solo el arroz.