El kale negro toscano es una de las especies contemplada dentro del grupo del kale, también llamadas coles rizadas o berzas. Es una verdura sabrosa, muy versátil y repleta de propiedades. Al kale negro toscano también se le llama kale dragón por la rugosidad de sus hojas, kale palma negra por el color de sus hojas y por su longitud y por lo tanto semejanza a una palma, kale lacinato y kale dinosaurio.
Esta planta la podemos cultivar en nuestro huerto urbano como la mayoría de coles ya que también pertenece a la familia Cruciferae (Brassicaceae). Conocida por griegos y romanos, actualmente es muy popular en países del norte de Europa y en EEUU por sus impresionantes valores nutritivos, aunque en España aún sea un cultivo bastante desconocido.
Su aspecto es similar a la berza aunque se diferencia de ella porque sus hojas son muy rizadas y de un color verde oscuro intenso. Esta característica también la hace interesante para huertos urbanos de terraza y balcón por aportar un plus ornamental muy interesante en este tipo de huertos. Además de su color, el kale negro toscano o dragón tiene una rugosidad muy particular en sus hojas… de ahí el sobrenombre de kale dragón, que llama la atención a los más pequeños de la casa cuando se les explica esta similitud con la piel de estos animales.
El kale dragón en cocina
El kale negro toscano o dragón es uno de los tesoros culinarios más desconocidos de Italia, país en el que viene siendo durante siglos un ingrediente esencial en infinidad de platos tradicionales. Conocido en Italia con el nombre Cavolo Nero di toscana, cada año va ganando peso en los restaurantes de moda en toda Europa. Este tipo de kale es el ingrediente esencial de la famosa sopa toscana ‘Ribollita‘, así como también es utilizado con mayor o menor protagonismo en la elaboración de diferentes platos italianos como por ejemplo: el risotto, la pasta y la frittata.
Otra forma de degustar esta hortaliza y además de forma sabrosa, es salteada en un buen aceite de oliva y aromatizado con ajo, limón, chile y sal marina. Destacar que cuando es cosechada durante las épocas más frías del año aumenta su dulzor natural porque las heladas tienen un efecto muy positivo en el sabor de sus hojas.
Consumida en fresco va bien en ensalada y deshidratada en el horno llega a adquirir una textura similar a las patatas fritas. En el norte de Europa se consume bastante como guarnición de salchichas o asados en modalidad cocida. De la misma forma también puede formar parte de muchas recetas sustituyendo a la espinaca.
Valor nutritivo del kale negro toscano o dragón
El valor nutritivo del kale negro toscano o dragón por cada 100 gramos contiene:
- Tan sólo 50 calorías.
- 135 mg de calcio (100 gramos de leche contienen 120 mg de Ca).
- 120 mg de vitamina C (la misma cantidad de naranja contendría unos 50 mg).
- Y es muy rico en potasio, conteniendo una cantidad similar a 100 gramos de nueces.
Cultivo del kale negro toscano o dragón
Indistintamente del tipo de huerto urbano que se trate, el Kale negro toscano o dragón es una planta ideal para su cultivo en épocas frías del año porque el frío mejora su sabor. Aun así puede cultivarse durante todo el año.
Su plantación en campo es en líneas sobre caballones, separadas unos 70 centímetros y con una distancia entre plantas de medio metro. En cuanto a la época de plantación es conveniente hacerlo unos 60 días antes de las primeras heladas para que cuando estas lleguen las encuentren fuertes y bien arraigadas.
Si las plantamos en maceta, el sustrato debe ser preferiblemente algo arcilloso aunque con buen drenaje. Le viene bien si lo enriquecemos con cantidades moderadas de materia orgánica. Su pH idóneo está en torno al 6,5. Pero no le tengamos miedo a su cultivo ya que el kale dragón es muy rústico y puede crecer bien casi sobre cualquier terreno.
El cultivo del kale dragón se debe desarrollar a pleno sol. Si se cultiva en maceta en balcones, procuremos que su exposición tenga la mayor cantidad de sol directo. Si son balcones muy sombríos… mejor optar por el cultivo de otras especies.
Un aspecto a tener en cuenta es la forma de crecimiento de sus raíces. Estas crecen muy superficiales, a escasos centímetros de la superficie. Así, en campo es conveniente realizar un acolchado con paja o compost muy suelto que le ayude a mantener el terreno fresco, húmedo y nutrido. En el caso de su cultivo en contenedor, utilizaremos preferentemente aquellos que sean anchos y bajos, aspecto que ayudará a ahorrar sustrato porque el profundo no será explorado por la planta. Por otra parte, estaremos muy pendientes del riego para que la capa superficial no se quede seca.
En cuanto a plagas y enfermedades, le atacan aquellas características de las coles: la mosca blanca y el pulgón, si bien no le suele atacar la oruga de la col (Pieris brassicae).
La cosecha del kale negro toscano o dragón se realiza cortando las hojas más grandes cuando estas todavía son jóvenes, porque si son viejas se vuelven duras y fibrosas. También se puede cortar la planta entera, pero recolectando sus hojas tal y como hemos avanzado da una mayor cosecha y durante más tiempo.
Siembra del kale negro toscano o dragón
La siembra del kale negro toscano o dragón la podemos realizar en semillero sobre bandejas de alvéolos. Para ello llenaremos la bandeja con un sustrato especial para semilleros, procurando no apretar en exceso el sustrato. En cada alvéolo colocaremos una semilla que enterraremos un par de centímetros y la regaremos.
Un gramo de semillas de kale negro toscano contiene unas 245 semillas, por lo que con un sobre de semillas tendremos de sobra para una campaña.
El semillero deberemos realizarlo a comienzos o mediados de otoño. Este germinará sobre los 10 días y a los 60 estará listo para su plantación. Trasplantado el kale dragón a finales de otoño… estará preparado para recibir las primeras heladas con posibilidades de afrontarlas bien.
