Entre los diferentes abonos sólidos que podemos adquirir se encuentran los fertilizantes granulados. Una modalidad que no debemos confundir con los formulados en pellets, en “clavos”, encapsulados o en bloques, si bien estos dos últimos parten de unidades granuladas.
Los fertilizantes sólidos se envasan en botes, bolsas o sacos y se pueden presentar en modalidades de microgranulados y macrogranulados. Entre estos dos tipos hay un abanico de tamaños que quedan en mano del libre criterio de las empresas fabricantes.
Fertilizantes microgranulados. Sus gránulos se presentan en partículas de 1 a 4 milímetros de diámetro. Este diminuto tamaño permite una dosificación más precisa y al tener proporcionalmente más superficie en contacto con el medio, actuar de forma más concreta.
Fertililizantes macrogranulados. En este grupo entran los fabricados mediante grandes gránulos, normalmente de 1 a 3 centímetros de diámetro e incluso mayores.
El desarrollo de los fertilizantes granulados.
Esta modalidad de fertilizante fue desarrollada a partir de nutrientes binarios como el nitrato de potasio (KNO3), nitrato amónico (NH4NO3), fosfato monoamónico (NH4H2PO4), etc. de forma que permitiesen al agricultor abonar sus campos de forma más cómoda.
Eran fertilizantes más avanzados en cuanto a formulación, con equilibrios ajustados tanto a cultivos como fases de los mismos. Con el tiempo, estos abonos granulados han evolucionado, siendo actualmente muy demandados en diferentes especialidades agrícolas, áreas verdes y ornamentales.
Tipos de fertilizantes granulados.
Estos fertilizantes granulados se pueden aportar en los cultivos con distintos fines, ya sea como abonado de fondo o abonado de cobertera, en función de las prácticas culturales empleadas por parte del agricultor. Para cada utilidad, el gránulo contiene la fórmula nutricional en las que entran en mayor o menor medida macroelementos y oligoelementos junto a un material apelmazante que le da la forma.
Puesto que las necesidades nutricionales de un cultivo varían a lo largo de su ciclo de crecimiento, en el mercado podemos encontrar una gran cantidad de fertilizantes granulados, formulados para satisfacer dichas necesidades nutricionales. Por su forma de actuación hay fertilizantes sólidos de liberación rápida, lenta y controlada.
Una de las características de este tipo de formulado es que no debe contener polvo. En cuanto a su manejo, pueden ser aplicados directamente al suelo de forma manual, esparciendo sus gránulos a voleo, así como de forma mecanizada mediante aperos asociados al tractor como centrífugas o localizadoras en líneas, ya sea para su aplicación en modo superficial o enterrada.
¿Cómo aplicar un fertilizante granulado?
Evidentemente, a la hora de aplicar un fertilizante granulado en un huerto urbano, en un jardín, en una zona deportiva, en un pequeño campo o en una gran extensión de cultivo, las diferencias pueden ser notables, tanto desde el punto de vista del abono granulado elegido hasta el modo de aportación al terreno.
Pero pongamos un método de como aplicar un fertilizante granulado que sirva de ejemplo:
- Lo primero es elegir el abono granulado adecuado para tus plantas o cultivo.
- Seguidamente es necesario medir el área que necesitas fertilizar. Como referencia, aunque aquí entran en juego el tamaño de gránulo y riqueza fertilizante del mismo, podemos poner como referencia que se puede utilizar una cucharada de fertilizante por metro cuadrado. No está de más leer cuidadosamente las características del fertilizante para ajustar las cantidades exactas que se necesitan.
- Si estamos ante grandes áreas a fertilizar, como por ejemplo jardines completos o campos con buena superficie, se puede recurrir a la utilización de un esparcidor de fertilizante. Con él se consigue que el fertilizante se distribuya por el suelo de forma más uniforme. Si lo hacemos de forma desigual, afectará a la correcta fertilización del cultivo. Es más, si en algunos puntos cae en exceso se pueden provocar quemaduras en las plantas.
- Si abonamos árboles ornamentales o frutales, grandes arbustos, etc. Es conveniente aportar el fertilizante directamente en la tierra y alrededor de las plantas que lo necesitan.
- En todos los casos es recomendable la utilización de guantes, pueden ser del tipo de jardinería, ya que los fertilizantes suelen contener productos químicos que dañan la piel.
- Una vez aportado el fertilizante granulado se procede a dar un riego con cuidado de no arrastrar los gránulos. Con ello se logra que el fertilizante se adhiera mejor a la tierra o sustrato.
Tipos de fertilizantes granulados según su composición.
Aunque algunos aspectos ya se han avanzado, los fertilizantes granulados se clasifican en función de los nutrientes que aportan. En este sentido, podemos distinguir tres tipos principales:
Los fertilizantes granulados simples, que contienen un solo nutriente principal esencial para el crecimiento de las plantas. Algunos ejemplos son los nitrogenados, que aportan nitrógeno (N) que es fundamental para el desarrollo vegetativo, estando entre ellos están la urea, el nitrato amónico o el sulfato amónico. Sobre los fosfatados, proporcionan fósforo (P) como macroelemento clave para el desarrollo de raíces y la floración. Un ejemplo es el superfosfato triple. Y entre los potásicos, que aportan potasio (K) para la mejora la resistencia de las plantas a enfermedades y estrés, y la calidad de los frutos, entre los que se encuentra el cloruro de potasio.
Los fertilizantes granulados compuestos combinan dos o tres nutrientes principales, generalmente nitrógeno (N), fósforo (P) y potasio (K). Se formulan en diferentes proporciones para adaptarse a las necesidades específicas de cada cultivo. Por ejemplo, un fertilizante NPK 15-15-15 contiene un 15% de cada uno de estos nutrientes. Otros ejemplos de formulaciones comunes son 12-8-16, 20-10-10, etc.
En el caso de los fertilizantes granulados complejos, los nutrientes se combinan químicamente en un solo gránulo durante el proceso de fabricación. Esto garantiza una mayor homogeneidad en la distribución de los nutrientes y una mejor eficiencia en su absorción por las plantas.
Cultivos donde se utilizan más los fertilizantes granulados.
Los fertilizantes granulados son una opción popular en diversos cultivos, gracias a su facilidad de aplicación y su eficiencia. Algunos de los cultivos donde su uso es más frecuente son en los cultivos extensivos, frutales de hueso y pepita, hortícolas con ciclos de cultivo largos, así como en áreas verdes y deportivas.
En cultivos extensivos, como grandes extensiones de cereales (trigo, maíz, arroz), oleaginosas (girasol, soja) y leguminosas (garbanzos, lentejas), los fertilizantes granulados se aplican a voleo o con abonadoras, lo que facilita la fertilización de manera uniforme.
Tanto en frutales de hueso (melocotonero, ciruelo) como de pepita (manzano, peral), este tipo de fertilizante, especialmente los de liberación lenta, aseguran una nutrición constante durante el ciclo del cultivo, favoreciendo el desarrollo de los árboles y la producción de frutos de calidad.
En cultivos hortícolas con ciclos de cultivo largos, como tomate, pimiento, patata, los fertilizantes granulados se aplican en el momento del trasplante o como abonado de fondo, proporcionando los nutrientes necesarios para un crecimiento óptimo.
Para el sector de la jardinería y paisajismo, existen fertilizantes granulados específicos que aportan los nutrientes necesarios para un crecimiento vigoroso y una mayor resistencia a enfermedades.
La seguridad en el manejo de fertilizantes granulados.
Si bien los fertilizantes granulados son seguros cuando se utilizan correctamente, es importante tomar precauciones durante su manejo. A continuación, exponemos algunas cuestiones al respecto.
Una de ellas es el almacenar los fertilizantes en un lugar fresco, seco y bien ventilado, lejos de productos inflamables y alimentos. Y por supuesto, mantener fuera del alcance de niños y animales.
Otra son los equipos de protección individual. Hay que utilizar guantes, mascarilla y ropa protectora durante la manipulación y aplicación de los fertilizantes.
Evitar el contacto con la piel o los ojos y en caso de contacto, lavar la zona afectada con abundante agua y jabón. Si el contacto es con los ojos, lavar con agua limpia durante varios minutos y buscar atención médica.
Es importante leer atentamente las instrucciones de la etiqueta del producto antes de su uso, siguiendo las recomendaciones del fabricante en cuanto a dosis, forma de aplicación y precauciones de seguridad.
Y de cara a la protección del medioambiente, es vital el evitar la contaminación de fuentes de agua con fertilizantes, así como aplicar las dosis recomendadas y nunca sobrefertilizar.
Innovaciones en fertilizantes granulados.
La industria de los fertilizantes está en constante evolución, buscando desarrollar productos más eficientes, sostenibles y respetuosos con el medio ambiente. Algunas de las innovaciones más recientes en fertilizantes granulados incluyen:
- Fertilizantes de liberación controlada con base en nanotecnología que permiten una liberación más precisa y eficiente de los nutrientes, reduciendo las pérdidas y el impacto ambiental.
- Fertilizantes granulados con bioestimulantes que combinan la nutrición mineral con la acción de bioestimulantes, que promueven el crecimiento y desarrollo de las plantas, mejorando su resistencia al estrés y aumentando la productividad.
- Fertilizantes granulados con microorganismos beneficiosos que llevan incorporados diferentes tipos de microorganismos que mejoran la salud del suelo y la disponibilidad de nutrientes para las plantas.
Deseamos que con esta información, puuedas utilizar los fertilizantes granulados de forma eficaz y responsable, contribuyendo a una agricultura más productiva y sostenible.