El uso de estiércoles para la producción de frutas y hortalizas es una práctica ancestral en la agricultura como fertilizante y enmienda orgánica. Una labor fundamental para mantener la fertilidad del suelo y mejorar la producción de cultivos, además de las mencionadas frutas y hortalizas, también de cereal, forrajeras, etc.
A nivel profesional, el manejo adecuado de los estiércoles requiere un conocimiento profundo de su composición, propiedades y efectos en el suelo y los cultivos. Los hay de diferentes procedencias y, por lo tanto, de cualidades. Por ello, en este artículo abordaremos las características de los principales tipos de estiércoles, sus ventajas e inconvenientes en la producción hortofrutícola, tanto intensiva como extensiva.
Características de los estiércoles.
Los estiércoles son una mezcla compleja de heces, orina y, a menudo, material de cama (paja, viruta, etc.) de animales. Su composición varía significativamente según la especie animal, la alimentación, el manejo del estiércol y el grado de compostaje.
Dentro de los fertilizantes agrícolas, los principales componentes de los estiércoles son:
- Materia orgánica (MO). Fracción orgánica del estiércol, compuesta por residuos vegetales no digeridos, microorganismos y sus productos de descomposición. Aporta beneficios a la estructura del suelo, la retención de agua y la actividad biológica.
- Nutrientes. Nitrógeno (N), Fósforo (P), Potasio (K), Calcio (Ca), Magnesio (Mg), Azufre (S) y microelementos (Fe, Mn, Zn, Cu, B, Mo). Las concentraciones varían según el tipo de estiércol.
- Microorganismos. Diversas poblaciones microbianas que participan en la descomposición de la materia orgánica y en la transformación de nutrientes.
Diferentes tipos de estiércoles y sus características.
Entre los diferentes tipos de estiércoles utilizados en agricultura, a continuación, describimos aquellos de uso más frecuente.
El estiércol de vacuno.
El estiércol de vacuno proviene de la ganadería de vacas, ya sea para producción de carne o leche. Es un estiércol rico en materia orgánica, pero con menor concentración de nutrientes que otros estiércoles. Su descomposición es lenta.
Entre sus ventajas están las que mejora la estructura del suelo, la retención de agua y la aireación, su aporte gradual de nutrientes y es adecuado para suelos arenosos.
Como inconvenientes, posee un menor contenido de NPK que otros estiércoles. También hay que contar con el riesgo de presencia de semillas de malas hierbas si no está bien compostado.
El estiércol de equino.
El estiércol de equino es el que proviene de producido por el caballo. Es rico en fibra, lo que mejora la aireación y el drenaje del suelo.
Como ventajas, aporta calor durante la descomposición, por lo que es beneficioso en climas fríos, y es adecuado para suelos arcillosos.
Entre sus inconvenientes, su bajo contenido de NPK, riesgo de presencia de semillas de malas hierbas y que requiere un buen compostaje para evitar olores y moscas.
El estiércol ovino.
El estiércol de ovino es proveniente de ovejas. Posee mayor concentración de nutrientes que el de vacuno o equino, especialmente de potasio.
Sus ventajas son el ser una buena fuente de potasio, importante para la fructificación y la calidad de los frutos. Y sobre sus inconvenientes, que puede ser más seco y difícil de manejar, así como que requiere un buen compostaje.
El estiércol de gallinaza.
El estiércol de gallinaza puede provenir de distintas fuentes, según sea de gallinas ponedoras de huevos, de engorde o para carne. Es el estiércol con mayor concentración de nutrientes, especialmente nitrógeno, y es de rápida descomposición una vez compostado.
Como ventajas, su alto contenido de NPK, especialmente N, que mejora la estructura del suelo y la actividad microbiana. Y como inconvenientes, requiere compostaje para evitar quemaduras en las plantas por su alta concentración de amoniaco y sales, puede acidificar el suelo y hay que contar con la variabilidad en su composición según la alimentación y el manejo de las aves.
El estiércol de conejo.
El estiércol de conejo, también llamado cuniculaza, posee un alto contenido de NPK y oligoelementos. Se considera un estiércol «caliente» por su rápida descomposición.
Sus principales ventajas son su rápida liberación de nutrientes y que mejora la estructura del suelo. Como inconvenientes, requiere compostaje para evitar quemaduras y puede ser difícil y costoso de obtener en grandes cantidades.
El estiércol de porcino.
El estiércol porcino, elaborado del cerdo, tiene un contenido variable de nutrientes, dependiendo de la alimentación. Generalmente, es rico en fósforo.
Este aporta fósforo, importante para el desarrollo radicular. En contra, puede tener un alto contenido de sales y metales pesados, dependiendo de la alimentación. Requiere un compostaje cuidadoso para eliminar patógenos y reducir malos olores, y no se recomienda su uso en fresco.
Guano de aves marinas.
El guano de aves marinas es fruto del acumulado en islas y zonas costeras. Es extremadamente rico en NPK, especialmente fósforo. Uno de los más populares es el guano rojo.
Entre sus ventajas está su alta concentración de nutrientes de rápida disponibilidad. E inconvenientes, su alto contenido de sales, lo que puede causar problemas de salinidad en el suelo. También requiere un manejo cuidadoso y dilución antes de su aplicación.
El estiércol de murciélago.
El estiércol de murciélago, también llamado guano de murciélago, es un recurso en países donde esta especie abunda en cuevas. Es rico en NPK y micronutrientes, aunque su composición varía según su alimentación.
Como ventajas, aporta nutrientes de rápida disponibilidad y mejora la estructura del suelo. En cuanto a sus inconvenientes está su limitada disponibilidad y su extracción debe ser sostenible para no afectar a las poblaciones de murciélagos.
Manejo del estiércol.
En la producción de estiércol, es fundamental compostarlos antes de su aplicación para reducir su volumen y el olor, eliminar posibles patógenos y semillas de malas hierbas, estabilizar sus nutrientes y evitar pérdidas por volatilización (especialmente el nitrógeno) y disminuir el riesgo de quemaduras en las plantas.
También es recomendable realizar análisis de laboratorio para conocer la composición del estiércol y ajustar las dosis de aplicación según las necesidades del cultivo. En cuanto a las dosis, depende del tipo de estiércol, el cultivo, el tipo de suelo y los resultados del análisis de suelo y estiércol. Es importante no exceder las dosis recomendadas para evitar problemas de contaminación por nitratos y fosfatos.
Otro factor es el momento de aplicación. Se recomienda aplicar el estiércol compostado antes de la siembra o el trasplante, incorporándolo al suelo. También se puede aplicar en cobertera durante el ciclo del cultivo, pero con precaución.
Y no se puede obviar ciertas consideraciones ambientales. El manejo inadecuado de los estiércoles puede generar problemas de contaminación del agua y del aire. En este sentido, es importante seguir las buenas prácticas agrícolas y las normativas vigentes.
En todo este contexto, como abonado orgánico, el uso adecuado de estiércoles compostados es una herramienta valiosa en la producción agrícola, permitiendo mejorar la fertilidad del suelo, reducir la dependencia de fertilizantes químicos y obtener productos de alta calidad.
Sin embargo, es crucial conocer las características de cada tipo de estiércol y manejarlo correctamente para maximizar sus beneficios y minimizar sus riesgos. El análisis del estiércol y el seguimiento de las recomendaciones técnicas son fundamentales para una gestión eficiente y sostenible.