Todos sabemos que hay muchas modalidades de huertos urbanos y que estos, a su vez, difieren entre sí gracias al ‘toque personal’ de sus propietarios.
En este post vamos a ver cómo es el huerto urbano de Mari Carmen Antequera. Lo tiene ubicado en su casa de Rafelbuñol, localidad muy cercana a la ciudad de Valencia (España).
Mari Carmen Antequera nos matiza que no es muy grande, que apenas supera los 60 metros cuadrados, pero suficiente para disfrutar de su ‘oasis’ de campo en pleno centro de esta localidad.
Cuando nos dice que en él tiene plantados árboles frutales, plátanos, hortalizas, plantas aromáticas y algunas ornamentales, la primera pregunta es ¿dónde? ¿En tan sólo 60 metros cuadrados? Y esta se responde nada más verlo.
Lo primero es saber que todas sus plantas conviven en este huerto urbano pactando anárquicamente sus espacios. Mari Carmen no desea imitar los campos agrícolas. Este huerto es su jardín en el que conviven aquellas plantas que desea tener… sin más, sin pretender extraer de ellas la máxima producción, simplemente disfrutar de ellas y sin buscarlo, estas le responden con la generosidad sus frutos.
Esta parte de ‘huerto – jardín’ está dividida en dos parcelas. En una predominan los frutales mientras que en la segunda las hortícolas. Alrededor del mismo encontramos macetas con algunas aromáticas y plantas ornamentales, sobre todo del tipo crasas.
Sobre los frutales, sus principales ‘inquilinos’ son una platanera y un naranjo. El naranjo da sus frutos año tras año fiel a su cita invernal, mientras que el platanero este año les ha obsequiado con una hermosa espiga llena de frutos. También hay otros frutales pero son mucho más jóvenes y hay que darles tiempo.
Bajo los frutales conviven algunas aromáticas como el romero. En maceta el perejil es un clásico al igual que la hierbabuena y en temporada, algunas albahacas.
En cuanto a las plantas hortícolas, Mari Carmen no mantiene una misma pauta año tras año. Cada estación del año tiene sus plantas más adecuadas pero el espacio le limita, por ello las elige las que va a plantar, en función de las preferencias del momento. Así, en la época fría del año son las habas, acelgas, alcachofas y algunas coles… y en la más cálida los tomates, pimientos, calabacín, pepinos, berenjenas, lechugas, etc. son especies por las que debe decidirse ya que todas es imposible poderlas cultivar.
Como adelantábamos, las plantas ornamentales también están presentes en el huerto urbano de Mari Carmen. Entre sus preferidas las plantas crasas, de las cuales posee una pequeña colección. Su ilusión es ir multiplicándolas en pequeñas macetas que luego regala a sus familiares y amigos que les visitan.
Para finalizar, no sería justo decir que este huerto urbano también lo es de su familia: Lorenzo Delgado y sus dos hijos, Lorenzo y Ada. Pero como Mari Carmen dice… yo soy la que más tiempo le dedico y por ello, este es el huerto urbano de Mari Carmen Antequera.
Vaya, eso se llama saber aprovechar bien el espacio. Está claro que, leyendo la historia de Mari Carmen, ya no hay excusa para no tener un huerto urbano. ¡Un saludo!