En el afán de cumplir con una economía circular, una gestión responsable de materias primas, optimizar recursos naturales, etc. se encuentra el digestato.

El digestato se define como el material resultante tras una descomposición de una materia prima biodegradable en condiciones de poco oxígeno, también denominada como digestión anaeróbica.

Derivado de esta digestión anaerobia, se producen dos productos principalmente: el digestato y el biogás.

¿Qué diferencias hay entre el compost y el digestato?

Cuando nos referimos a un material biodegradado, también nos viene a la memoria el compost. Sin embargo, el digestato y el compost no son lo mismo.

¿Qué es el digestato?

El digestato, como hemos adelantado, es un subproducto obtenido tras la digestión anaerobia de la materia orgánica, con la que además se obtiene el biogás.

Este proceso se realiza en el interior de unos reactores herméticos denominados digestores, con los que se permite recrear las condiciones controladas para que intervengan adecuadamente diversos microorganismos, principalmente bacterias, que son las encargadas de ir degradando los residuos orgánicos aportados.

Tras este proceso de digestión anaerobia o biometanización, además del biogás, se consigue una materia orgánica sólida y líquida estabilizada, denominada digestato. Este es considerado un fertilizante orgánico.

Generando compost

¿Qué es el compost?

En cambio, el compost orgánico es obtenido mediante la fermentación aerobia de los residuos orgánicos y, por lo tanto, con presencia de oxígeno. Esta fermentación se produce gracias a la acción de diversos microorganismos, como por ejemplo hongos, bacterias, lombrices, etc. Y para que estas condiciones favorables se den, es necesario mantener unas condiciones controladas de ventilación, humedad y temperatura. Si para elaborar una enmienda orgánica a base principal de las lombrices, se denomina vermicompost o humus de lombriz.

Este proceso se llama compostaje y durante ese tiempo se consigue la homogenización de los materiales, la reducción de su masa y volumen, e incluso su higienización.

Así, aunque ambos tengan elementos y funciones en común, mientras el digestato tiende a ser considerado como un fertilizante, el compost lo es como mejorador de suelo o enmienda orgánica.

¿Qué materias primas se pueden utilizar para producir digestato?

Las principales materias primas para producir digestato son residuos orgánicos, que pueden provenir de diversas fuentes. Algunas de las principales materias primas para producirlo incluyen:

El estiércol animal. Puede ser procedente de vacas, cerdos, aves de corral, etc. Este es rico en nutrientes y proporciona una base sólida para la producción de biogás y digestato.

Los residuos de alimentos. Principalmente, son restos de alimentos de hogares, restaurantes, supermercados y otras instalaciones, son una fuente valiosa de materia orgánica para su producción.

Los residuos agrícolas. En este caso, restos de cultivos como tallos, hojas y demás. Estos son una fuente abundante de materia orgánica que puede ser reciclada mediante la digestión anaeróbica.

Los biosólidos. Por ejemplo, los lodos orgánicos derivados del tratamiento de aguas residuales. Estos lodos contienen altos porcentajes de materia orgánica y nutrientes.

Los residuos industriales orgánicos. Algunas industrias generan residuos orgánicos que pueden ser utilizados en la producción de digestato, como, por ejemplo, las industrias procesadoras de carne, pescado, zumos, etc.

La biomasa vegetal. Ejemplo de ella son la paja, el heno, los restos de siega, poda y del mantenimiento de jardinería, limpieza de montes, etc.

Es importante tener en cuenta que las características del digestato, incluyendo su composición nutricional, pueden variar según la fuente de los materiales orgánicos utilizados en el proceso de digestión anaeróbica. Por lo tanto, la selección cuidadosa de las materias primas es crucial para obtener un digestato de calidad que pueda ser utilizado como fertilizante o en otras aplicaciones agrícolas.

Producción de digestato

¿Qué características beneficiosas tiene el digestato para la agricultura?

Una vez obtenido el digestato, la siguiente fase es su utilización, para así, cumplir el fin de su obtención, actuar dentro del marco de una economía circular y optimización de recursos. En esta línea, se encuentra su uso principal en agricultura, siendo este muy diverso. A continuación, destacamos algunos de ellos.

Como mejora de la fertilidad del suelo. Ya lo hemos avanzado. El digestato es rico en nutrientes como nitrógeno, fósforo y potasio, además de ciertos microlelementos.

Como mejora de la estructura del suelo. Este ayuda a mejorar la estructura del suelo al aumentar su capacidad para retener agua y nutrientes, lo que contribuye a un mejor crecimiento de las plantas.

Incidencia en la sostenibilidad. Al utilizarlo como fertilizante, contribuye a reducir la dependencia de los fertilizantes químicos, lo que puede ser más sostenible a largo plazo y reduce la contaminación del suelo y el agua.

La reducción de residuos. De igual forma, al utilizar desechos orgánicos para producir biogás y digestato, se reduce la cantidad de residuos que terminan en vertederos, lo que ayuda a mitigar el problema de los desechos y la contaminación ambiental.

Futuro del digestato

¿Reflexiones sobre el futuro del digestato?

El futuro del digestato parece muy prometedor y está lleno de oportunidades en diversos campos. Algunas tendencias y aspectos clave a considerar sobre el futuro del digestato pueden ser:

En sostenibilidad agrícola. Con el aumento de la conciencia sobre la sostenibilidad, se espera que su uso como fertilizante orgánico continúe creciendo. Los agricultores están buscando alternativas más ecológicas a los fertilizantes químicos, y el digestato proporciona una opción respetuosa con el medioambiente.

Respecto a tecnología e innovación. Aunque la tecnología relacionada con la digestión anaeróbica está en constante evolución, se están desarrollando sistemas más eficientes y rentables para la producción de biogás y digestato. Además, la investigación está enfocada en optimizar su composición para que se adapte mejor a las necesidades específicas de los diferentes tipos de cultivos.

En economía circular. Estamos ante un excelente ejemplo de economía circular, donde los desechos se convierten en recursos valiosos. A medida que las políticas y regulaciones favorecen este enfoque, es probable que su uso siga creciendo en diferentes sectores.

La valorización de residuos. Es notorio que la gestión de residuos seguirá siendo un desafío global. La capacidad del digestato para convertir desechos orgánicos en productos útiles, como fertilizantes y biogás, lo convierte en una parte importante de las estrategias de gestión de residuos en todo el mundo.

En biotecnología y genética. En este contexto, la investigación en biotecnología y genética vegetal, podría llevar al desarrollo de cultivos específicos que se beneficien particularmente del digestato. Podrían desarrollarse plantas que sean más eficientes en la absorción de los nutrientes del digestato, lo que aumentaría su valor como fertilizante.

La adaptación a cambios climáticos. Con el cambio climático, se esperan cambios en los patrones de cultivo y disponibilidad de agua. En este sentido, el digestato, al mejorar la estructura del suelo y la retención de agua, podría ser una herramienta importante para ayudar a los agricultores a adaptarse a estos cambios.

¿Es fácil de producir digestato en explotaciones agrícolas pequeñas, como huertos urbanos?

La producción de digestato en explotaciones agrícolas pequeñas, como huertos urbanos, puede ser factible, aunque hay diversos factores a considerar. Entre ellos está la escala de Producción, donde las explotaciones agrícolas pequeñas generalmente tienen menos cantidad de material orgánico disponible en comparación con grandes explotaciones.

Por otra parte, la digestión anaeróbica requiere tecnología específica, como digestores anaeróbicos, que pueden ser costosos y necesitan cierto espacio. Para huertos urbanos pequeños, se necesitarían tecnologías adaptadas a pequeña escala y posiblemente más asequibles para que el proceso sea práctico y viable económicamente.

Las regulaciones y permisos, que dependiendo de la ubicación y las legislaciones locales, podría ser necesario obtener permisos para operar un sistema de digestión anaeróbica incluso en una pequeña escala. Cumplir con las regulaciones puede ser un desafío adicional para las explotaciones agrícolas pequeñas.

Sobre el conocimiento técnico, la puesta en marcha de un sistema de digestión anaeróbica requiere cierto conocimiento técnico para garantizar que el proceso se lleve a cabo de manera eficiente y segura. Los agricultores urbanos necesitarían acceso a información y apoyo técnico para implementar y mantener un sistema de digestión anaeróbica de manera efectiva.

Así, mientras que es posible producir digestato en explotaciones agrícolas pequeñas como huertos urbanos, existen desafíos significativos relacionados con la escala, la tecnología, la gestión de residuos, las regulaciones y el conocimiento técnico. La viabilidad de su producción en huertos urbanos dependerá de la capacidad para abordar estos desafíos de manera efectiva y encontrar soluciones adecuadas para cada situación específica.

 

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