Una de las plagas de la alcachofa más complicadas de controlar es el barrenador de la alcachofa o como también se le conoce, taladro de la alcachofa.
En su estado de oruga, puede causar graves daños, tanto en la planta de la alcachofa como en la del cardo, planta a la cual también ataca.
Gortyna xanthenes o Hydroecia xanthenes
El nombre científico del barrenador de la alcachofa es Gortyna xanthenes Germar, en algunos tratados también denominados Hydroecia xanthenes, es un lepidóptero perteneciente a la familia Noctuidae.
En su estado adulto es una mariposa, de unos cinco centímetros de envergadura, cuyas alas anteriores son de color marrón en dos tonalidades, y las posteriores, de color crema.
En estado juvenil, su oruga adulta puede tener una longitud de alrededor de los cinco centímetros, posee cinco pares de falsas patas abdominales y es de color crema con puntos negros diseminados por todo el cuerpo.
Ciclo fenológico del barrenador de la alcachofa
Partiendo de la aparición de los adultos, estos aparecen en cultivo sobre el mes de octubre, durante el otoño. Seguidamente se aparean y en pocos días las hembras realizan sus puestas sobre la planta de alcachofa o cardo.
Como avanzamos, su puesta se realiza a principios de otoño y sus huevos son situados en hojas y preferentemente en las grietas del tallo a nivel del cuello de la planta.
Estos huevos eclosionan de forma muy escalonada según factores como la climatología, por lo que una sola puesta puede generar orugas desde diciembre hasta finales de marzo.
Estas orugas de Gortyna xanthenes o Hydroecia xanthenes, nada más nacer comienzan a alimentarse de las hojas y muy pronto penetran en el nervio central de la hoja en dirección al tallo. En el interior de este, desarrollan toda su vida como oruga.
Tras completar todo su estado larvario, ya en verano, o bien dentro de la planta o por el interior de su tallo, salen de la planta y se desplazan a nivel del suelo donde generan la pupa. Con el tiempo terminan transformándose en mariposa. Sus adultos salen de su pupa en otoño y vuelve a comenzar su ciclo biológico.
Control del barrenador de la alcachofa
El ataque del barrenador de la alcachofa deriva en el debilitamiento de las plantas de alcachofa o cardo e incluso pueden provocar su muerte. La forma de identificar su ataque es coger capítulos florales o tallos que intuimos afectados y tras seccionarlos, vemos en su interior el horadado generado por la oruga.
Estos taladros pueden ser muy largos. De hecho, pueden ocupar desde la base de la planta hasta el corazón del capítulo floral. Si llegan al fruto, este queda totalmente depreciado para su comercialización.
Durante todo el cultivo de la alcachofa o cardo, tenemos que estar atentos a posibles ataques, ya que como hemos avanzado, la eclosión de sus huevos abarca un gran período de tiempo.
Las acciones orientadas a su control deben estar enfocadas antes de que sus orugas se introduzcan en el interior del tallo.
Como siempre, somos muy cautos a la hora de hablar de insecticidas concretos, porque por una parte cada país tiene una regulación específica que dictamina cuáles sí y cuáles no se pueden utilizar. Y además, constantemente se están revisando, saliendo y entrando productos al mercado.
En el caso de España, se puede consultar los productos permitidos, copiando este enlace en su navegador: https://www.mapa.gob.es/es/agricultura/temas/sanidad-vegetal/productos-fitosanitarios/registro/productos/conaplipla.asp
En el caso de emplear productos fitosanitarios, ecológicos o no, debe realizarse mediante pulverización procurando mojar toda la planta, incluso los tallos. Funcionan muy bien los sistémicos y su aplicación puede efectuarse con mochila o equipos de tanque de tratamientos. En todos los casos hay que respetar escrupulosamente los tiempos de seguridad entre tratamiento y recolección.
Como medidas culturales para su control, se recomienda ajustar los tratamientos justo después del corte de la alcachofa para evitar problemas de residuos, así como destruir las plantas afectadas durante el verano.
El barrenador de la alcachofa tiene algunos enemigos naturales, como por ejemplo, el parasitoide Ichneumon sarcitorius. Se trata de un insecto cuyas larvas se alimentan de orugas de diferentes especies, mientras los adultos se alimentan principalmente de néctar.
También están en el mercado trampas mediante feromonas. Estas se suelen comercializar en sobres individuales con su difusor de feromona. Tiene una efectividad de unos 40 días desde su apertura y se recomienda utilizar en trampas tipo delta.